RESEÑA, EL ABUELO QUE SALTÓ POR LA VENTANA Y SE LARGÓ

Esta es la primera novela del autor  que ha obtenido un gran éxito en su país, recibiendo numerosos premios.

Jonas Jonasson, en un momento dado, decidiendo cambiar de vida vendió todas sus posesiones en Suecia y se trasladó a una pequeña ciudad junto al lago de Lugano en Suiza, en el que escribió un manuscrito. El manuscrito se convirtió en una novela. La novela se convirtió en un fenómeno en Suecia, y ahora lo es en el resto del mundo, habiendo vendido más de un millón de copias.

El protagonista Allan Karlsson, es una combinación extraña entre Dorothy y Forrest Gump. Es Dorothy en el presente, ya que desde el momento en que Allan decide fugarse el día de su 100 cumpleaños, saltando desde la ventana de su habitación vestido tan sólo con su traje y sus meadillas,  (nombre que le ha dado el protagonista a las zapatillas ya que a su edad sabe que cuando se va al baño algo siempre cae en ellas) se va encontrando y llevando  consigo en su aventura, a una serie de personajes de lo más extraños y cómicos.

 

Y por otro lado es Forrest Gump, ya que el autor nos cuenta también la vida de nuestro entrañable viajero, paralelamente a la actualidad, y en este relato Allan es el protagonista, no reconocido por supuesto, de alguno de los momentos más importantes de la historia del mundo, codeándose con personajes como Franco, Stalin o Churchill, siendo el creador de la bomba atómica o doble agente secreto.

 El autor tiene una manera maravillosa de hilar las historias de presente y futuro y como dice Allan hay que dejarse llevar porque las cosas que tiene que suceder, sucederán sin importar lo que uno haga. aunque en ocasiones el pasado se hace un tanto tedioso, va todo demasiado despacio; desde luego la parte del presente es la que le da la nota de acción a toda la historia.

Es un gran libro, original, con el que pasareis un buen rato, en el que encontramos acción, intriga y mucho humor. Que disfrutéis de la lectura.