
Allá por el 2008 el autor americano, David
Oppegaard fue nominado al Premio Bram Stocker a la mejor novela. Era lo primero
que David sacaba al mercado y con este argumento desde luego tenía bastante ya
ganado:
“La Desesperación lleva cinco años asolando el planeta. La mayor parte de
los habitantes de la Tierra ha perecido inexplicablemente por su propia mano, y
los pocos supervivientes que quedan se afanan por seguir con vida. Un oscuro y
misterioso grupo emergente, conocido como los Recolectores, se presenta
inexorablemente para llevarse los cuerpos de los muertos. En el asolado estado
de Florida, un hombre llamado Norman opone una resistencia sin precedentes
contra los Recolectores que lo impulsa a emprender un viaje a través de los
Estados Unidos. Se rumorea que en Seattle hay un científico que trabaja en una
cura para la Desesperación, pero, en un mundo dominado por la muerte, a Norman
no le resultará fácil llegar hasta allí.”