RESEÑA, MI BESTIA

PÀMIES

“Mi bestia” junto con la anterior novela “Mi custodio” forman parte de la serie “Oscuros” de la escritora española Laura Nuño. Están encuadrados dentro del subgénero romántico paranormal.

A pesar de ser historias independientes creo que es recomendable leerlos por orden ya que en esta segunda entrega aparece la pareja formada por Ronan y Alba, una historia, que me enamoró y fue el aliciente para continuar con esta serie y esta escritora, aunque las expectativas que tenía en ella se hayan visto en cierto modo empañadas.

Al igual que en su predecesora el peso principal de la narración recaerá sobre el protagonista masculino; en este caso será Leo el que nos relatará lo que le sucedió desde el momento en el que conoció a “su sosaina”, una perspectiva no demasiado utilizada en la novela romántica dando una visión original a la historia de amor o más bien, en este caso, deseo y pasión.

Laura Nuño nos presenta un mundo imaginario en el que la noche está gobernada por los Ocultos, especie de inmortales destinada a proteger a los humanos de cualquier otra criatura por la que se vean amenazados. Entre ellos se encuentran los bestias, aquellos en los que en su interior habita un animal feroz, que una vez que se desata arrasa con todo; entre ellos por supuesto, se encuentra Leo, el líder de esta especie.

En las contadas ocasiones en las que la bestia obtenía el control, él despertaba aturdido y sin ningún recuerdo; en uno de esos lapsus, la bestia que anida en su interior decidió que aquella criatura con ojos de gata sería suya, y la marcó para que nunca nadie se atreviera a tocarla hasta que llegara la hora de reclamar lo que por derecho le pertenecía. Leo no logra comprender lo que está sucediendo, ya que últimamente la bestia se apodera de sus sentidos casi cada día y cuando se despierta enfrente de la misma casa, su deseo es incontrolable, pero no de sangre, sino que va más bien encaminado a algo más carnal, en los que abundan los jadeos y el placer. Así que decide investigar que se esconde detrás de esas paredes. Es de este modo como comienza la persecución para Leo: Y así es como la conocí a ella. Mi vida cambió radicalmente cuando yo, una bestia desalmada y egoísta, fijé como único objetivo de mi inmortal existencia hacerla mía. Aunque algo me dice que va a ser una misión imposible; las princesas hermosas jamás se quedan con el monstruo del cuento…

Leo, tal como él nos lo cuenta, es desalmado y egoísta, fue su egocentrismo lo que me llevó a la desesperación y no empatizara de primeras con él; además es terriblemente mal hablado. No me importan ciertas expresiones pero lo de este muchacho ya es excesivo. Gracias a la manera de presentarnos negativamente a este personaje creará un gran contraste entre lo que es y en lo que se convertirá cuando su amor se convierta en obsesión. Desde luego y a pesar de que su bestia fuera desalmada agradecía los momentos en los que ella aparecía ya que desde luego tenía las cosas claras y era decidida, defendiendo siempre lo que era suyo y sin lo que desde luego no deseaba vivir. Lo siento pero este chico me gustó más bien poco y desluce el resto de la historia.

Serena es dulce y apacible pero distante, todo lo contrario a la bestia, un ser despiadado y letal, dos seres totalmente diferentes pero entre ellos nacerá una pasión difícil de gobernar. Ella conseguirá que el mundo de Leo se tambalee, y cambiar su universo, comenzando a desear cosas que normalmente no se atrevería ni a soñar. Laura Nuño de nuevo nos sorprenderá con una manera única de relatarnos esta historia de amor y un mundo original lleno de increíbles criaturas. El hecho de que Leo con su prepotencia y egocentrismo y con un solo pensamiento en la cabeza, o más bien en “su otra cabeza” no me terminara de enamorar, ha sido el factor que ha supuesto que la historia no me calara como su predecesora, haciéndoseme un poco difícil el terminar la historia; de todos modos supongo que le daré una oportunidad al próximo muchacho “Mi druida”; creo que tiene muchas posibilidades.