RESEÑA, EL JUEGO DE ENDER

EDICIONES B

            “El juego de Ender” es la historia que da comienzo a la Saga de Ender, que en sus inicios era un relato, pero que fue extendida hasta ser convertida en novela. Actualmente la saga comprende once novelas y diez relatos cortos. Ha ganado diversos premios a la mejor novela de ciencia ficción, como son el Hugo y Nébula. Por supuesto, ha sido llevada a la gran pantalla por el director Gavin Hood, con guión del propio escritor, Orson Scott Card.

            Hay momentos que te planteas el no leer una novela, a pesar de que te llama poderosamente la atención, por el simple hecho de que el escritor que la ha creado no es santo de tu devoción. Esto es lo que me sucedió precisamente con la que nos ocupa. Cómo unirte a la horda de seguidores cuando el tipo es tan desagradable, xenófobo e ideas contrarias a tu manera de pensar. Al final ha ganado la batalla mi curiosidad por conocer a Ender. Supongo que en ocasiones debemos separar historia y creador, a pesar de que ambos se complementen.

            Andrew Wiggin, es el tercero en una sociedad en la que solo se permite tener dos hijos. Aunque él prefiere que le llamen Ender. Los tres son superdotados, pero su hermano mayor es un asesino en potencia y su hermana demasiado blanda. Él tiene un poco de ambos, un ser bondadoso pero que puede ser en un momento dado un asesino, perfecto para convertirse en un futuro héroe. Reclutado a los seis años, se preparará durante toda su infancia para ser el próximo comandante que acabe con los insectores, una raza alienígena que anteriormente estuvo a punto de aniquilar a la raza humana. Como parte de su entrenamiento Ender participará en diversos juegos reales, compitiendo contra sus compañeros, y otros virtuales.

            A parte de lo imaginativo que resulta todo, en relación a la trama que ha creado, así como las descripciones de los juegos y el planeta donde transcurre toda la historia, llama poderosamente la atención, o al menos para mí, la evolución del personaje principal, Ender. Seremos testigos de como el trato recibido por sus superiores, así como por el resto de sus compañeros, lo van forjando con una gran personalidad, pero también en un ser solitario, que no tendrá a nadie en quien apoyarse o en quien confiar. Sentí rabia al ver como movían los hilos para que llegara a ser lo que ellos querían. Nunca le permitieron actuar como un niño. Siempre luchando y preparándose para ser la salvación de la tierra. El escritor desarrolla su evolución de manera única y muy visual. Es casi como si compartiéramos su vida con él, llegando a conocerle perfectamente y empatizando con sus desventuradas vivencias. No hay piedad en el pequeño mundo donde habita Ender y su infelicidad no significa nada para nadie.

Aunque la historia me ha gustado bastante, no creo que continúe con ella, debido al gran número de entregas y lo lioso que resulta seguirla en orden. En realidad son dos sagas que se superponen una a la otra, y con lo meticulosa que soy yo para esos temas, el tener que estar mirando cuál sigue a cuál cronológicamente me supone mucho trastorno. Y os recuerdo que son once entregas. ¡Venga ya! Y el escritor sigue vivo, y tal vez se le ocurra la brillante idea de ampliarla un poco más, creyendo que no son suficientes.

            Está considerada como una novela esencial dentro de la ciencia ficción. Estoy de acuerdo en que el escritor consigue envolverte y trasladarte a través de sus descripciones a este planeta para conocer la vida de Ender, un personaje por el que sentirás pena y orgullo a partes iguales. A pesar de que es una novela más que recomendada para los que gusten de este género, y que en líneas generales he disfrutado bastante, no se llevará la mejor nota porque en ocasiones se me hizo un poco pesada; aún así, invito a todos aquellos que se pirran por fabulosas historias futuristas, que le den una oportunidad a Ender y que le acompañen durante su desolada infancia, dedicada únicamente a la supervivencia. Imaginativa, intrigante, con diversos cambios que nos sorprenden, perfecta para los amantes de la ciencia ficción, con un final agridulce que puede incitar a seguirle la pista a Ender.