RESEÑA, ANTE TODO, MUCHO KARMA

ESPASA

            Después de que sus lectores le pidieran un poquito más de karma, tras su exitosa novela “No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas”, la escritora Laura Norton, que aún se esconde sin darse a conocer, les dio a su público lo que le estaban pidiendo “Ante todo, mucho karma”. Entre medias nos dio a conocer la historia de Bea en “Gente que viene y bah”

            No solo ha obtenido un éxito importante en ventas sino que la primera parte de la historia de Sara y Aarón tuvo tanta repercusión que ya ha sido llevada al cine. Tal vez esta última siga el mismo camino que su predecesora.

“Si creías que después de volver con Aarón, Sara, nuestra Sara, iba a alcanzar la paz y la serenidad, es que no la conoces... ni a ella, ni al p... karma. 

Al comienzo de esta novela, Sara se encuentra justo al principio de su cuento de hadas: un trabajo apasionante, un esposo apasionado y un hijo de anuncio. Pero a pesar de esta mano ganadora, ¿es feliz? Pregunta retórica donde las haya: si no tiene motivos para torturarse, Sara los buscará hasta debajo de las piedras, y los encontrará, ¡vaya si los encontrará!”

            En todas sus historias el personaje sobre el que pivota toda la trama son esas mujeres de hoy en día que intentan hacer malabares entre la vida profesional y la personal subidas en unos espectaculares tacones. Son ellas las que nos cuentan su historia, porque una vida para contarla, esa es la tuya. Para bien o para mal las conocemos sin reservas, desde sus mediocridades hasta sus triunfos, nadie es perfecto y ellas tampoco lo pretenden, tan solo salir airosas en esto que llamamos vida.

Representan a las mujeres de hoy en día, aquellas que luchan por destacar en sus profesiones y lidiar con sus familias. Por supuesto Norton le da una vuelta de tuerca con situaciones un tanto alocadas y una familia que en algunos casos sería mejor tenerla bien lejos, pero que de algún modo se convierten en entrañables para los lectores y por supuesto, nos hacen reír con sus tonterías e ideas disparatadas.

            Encuentro que no es una novela para todos los públicos, principalmente por el lenguaje utilizado, un tanto vulgar en ocasiones, y muy directo, como si la protagonista nos estuviera contando la historia personalmente a nosotros, unido por supuesto a demasiadas situaciones que muchos pueden encontrar extravagantes y otros entretenidas e increíbles. Norton ha tenido muy buenas críticas, pero también lectores que no quieren ni acercarse a sus libros. A gustos, colores.

Segundas partes nunca fueron buenas, o eso dicen. Yo he encontrado en esta, una manera interesante de pasar un rato entretenido descubriendo a Sara y sus vicisitudes, desquiciándome con sus ideas demasiado pesimistas en ocasiones, eso también, pero en general poniéndome una sonrisa en la cara con momentos y sucesos que nos sorprenderán por lo increíble y caótico. No teman aquellos que no han leído la primera parte, Norton nos introduce perfectamente en la vida de Sara para que la conozcamos sin problemas a ella y a todos que están a su lado.

Decisiones acertadas o no, en esta ocasión Sara se busca en cierto modo todo lo que le sucede como consecuencia de sus incertidumbres y miedos que le llevan a comportarse de manera un tanto ilógica; con un poquito de ayuda del karma que no se lo pone nada fácil.

Directa, íntima, caótica y siempre con ese toque de humor que ya caracteriza a Norton, gracias a situaciones desbordantes de imaginación y tal vez poco posibles en circunstancias normales. Anímense a adentrarse en la vida de Sara y ella se encargará de entreteneros y alegrarlos el día aunque solo sea por unas horas.

De esta reseña se ha hecho eco la revista CULTURAMAS